EN LA SOLEDAD DE MI CUARTO
Hablaba de libros y me reía por todo...
Los mejores consejos los pronuncian mis labios
arregle unos cuantos corazones rotos y almas fragmentadas
Pero...
Cruzaba la puerta,dejaba mi bolso
y como autómata trataba de hacer algo de comida
Me sentaba en el suelo de la ducha para llorar
llorar hasta que me dolía la cabeza
llorar hasta que me sentía enferma
caliente
con fiebre
Enferma
Sin vida
Abría mis cuadernos y hacia las tareas
Esas hojas todavía tienen manchas de lágrimas
Trataba de no llorar más
¿por qué lloraba?
No tengo ninguna idea de porque lloro
No me puedo parar de mi cama
Mis pobres almohadas,
Las únicas testigos de mis gritos desgarradores
Solo lloraba en la soledad de mi cuarto.
Sin razón aparente.
Sin motivación para parar.
Llegaba un nuevo día,
Colocaba compresas frías en mi cara para bajar la hinchazón
Preparandome para una nueva jornada
Regalando sonrisas,
sin recibir ninguna a cambio
Propinaba abrazos,
sin que otros brazos rodearan mi torso
Otra tarde de llegar a mi casa,
a mi cuarto
Para llorar otra vez
sin saber el por qué.
Autor: María Rosalix
Holis rusleros, esta vez un poema, si se le puede llamar poema, diría que es un grito de reflexón en estos días observe unos videos en youtube sobre la depresión, y fueron esos rostros los que me inspiraron a hablar o a tratar de reflejarlo en un texto, como se siente, lo que haces, pero simplemente no sabes el porque.
Lo peor de todo es que a veces las señales de una persona depresiva están frente a tus ojos, pero como dice la frase no hay peor ciego que el que no quiere ver.
Un consejo que siempre doy es sonrie porque nunca se sabe quien pueda necesitar de tu sonrisa ese día.
BYE RUSLEROS
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